Imaginar por un instante que un día como otro cualquiera os levantáis para ir a trabajar. Durante el camino hacia la oficina os vienen a la cabeza los pensamientos habituales del día a día. Ese proveedor que no manda el material a tiempo, ese cliente que no acaba de aceptar nuestro presupuesto, esa nueva campaña de marketing que pretendes lanzar, ese empleado que tiene problemas en casa y afecta a su rendimiento, ese préstamo que has pedido al banco para ampliar tu negocio, etc. El día a día de toda empresa. Ahora imaginar que llegáis a vuestro lugar de trabajo y al sentaros en vuestro ordenador os dais cuenta que no podéis acceder a vuestros datos. Vuestros datos simplemente ya no están o han cambiado a un formato ilegible. No podéis acceder a la contabilidad, no podéis acceder a los presupuestos, albaranes, base de datos de vuestros clientes, correo electrónico, datos bancarios, listado de contraseñas, etc. A partir de ese instante, todo lo que traías desde casa en el pensamiento pasa a un segundo plano. Ahora os enfrentáis a un verdadero problema con un factor de urgencia sumamente elevado. Las preguntas auto respondidas no dejan de martillear la mente mientras intentáis mantener la calma para poder dar el siguiente paso. En el mejor de los casos levantar el teléfono y llamar a tu empresa de mantenimiento informático.
- ¿Qué ha podido pasar? ¿Se habrá estropeado algo o nos ha entrado el virus ese del que tanto se ha hablado en prensa y televisión?
- ¿Tenemos copia de seguridad? Si claro. En un disco duro externo. Eso me dijo la empresa de mantenimiento informático.
- ¿Cuándo volveremos a poder trabajar? ¿Qué le decimos a nuestros clientes? Seguro que el soporte informático lo soluciona.
- ¿Los datos de mis clientes han podido verse comprometidos? No creo, ¿quién va a querer eso? ¿Debo informar a la agencia de protección de datos?
- ¿Y toda la documentación urgente que había preparado para enviar hoy seguirá estando? Creo que la termine ayer. ¿Habrá copia no?
Si habéis puesto el debido interés en imaginar la escena o si por desgracia habéis sufrido una situación similar, podéis haceros una idea de la importancia y el grado de criticidad que tiene el tema de las copias de seguridad.
Pero no solo pretendemos centrarnos en la importancia de realizar copias de seguridad, sino en la capacidad de resiliencia de vuestra empresa. En cuanto tiempo puede tu empresa recuperar la normalidad para seguir trabajando. ¿Horas, días, meses? Todo depende de los tipos de copia implementados (sí, hablamos en plural) y de los sistemas empleados en realizar dichas copias de seguridad.
En la siguiente entrada de blog os explicaremos los distintos sistemas de copia que existen, y os recomendaremos desde nuestro conocimiento y experiencia la mejor fórmula para que vuestra empresa no pierda información y se recupere en el menor tiempo posible.